Concepción Silva Bélinzon
Poetisa uruguaya, nacida en Montevideo en 1900. Se especializó tanto en sonetos, como en oda sáfica. La religiosidad se ve reflejada en sus obras, las cuales suelen ser más espirituales que intelectuales.
Comenzó a publicar sus trabajos en la década del ´40. Su primer libro fue “El regreso de la samaritana” (1943) y luego publicaría títulos cada dos, tres o cuatro años. Entre ellos se destacan: La mano del ángel (1945), Amor no amado (1950), La ciudad invisible (1959), Me espera el mundo entero (1963), Llamarlo y despedirlo (1976) y Sitios abandonados (1979), entre otros.
Obras destacadas
Sitios abandonados
Sitios abandonados, mi trabajo,
estoy inaugurando otra existencia;
porque ya recomienza muy abajo
repito millonaria esta presencia.
Fe de revelación en mi demencia
fresca y eterna de magnolia un gajo;
llenar de amor, olvido y penitencia
gemir de aquella flauta, ya no atajo.
Apenas son dos ojos que persigo
no me reservo nada, cada día
cumpliendo con mi oficio voy contigo.
Son apenas dos manos, son mil puertos
un pájaro flirteaba y se desvía
y todo comenzó sobre los muertos.
Más sabes que los astros
Más sabes que los astros la armonía
del que siempre te tuvo, en su corona,
la cascada del bosque que pregona
tu voz más que el silencio yo diría.
Sobre dolientes líquenes vigía
hasta la niebla misma te perdona;
y el lagarto inceleste se abandona
por luz tan verdadera que lo guía.
En su gran Mano de Oro tu cabeza,
junto al niño que cuidan las doncellas
no conoces secretos ni flaquezas.
Como el sol en las uvas moscateles,
supiste madurar con las estrellas
la rueda se derrumba en tus laureles.
Ojos de diamantes
Quiero escribir palabras de estas noches
en difícil o claro indivisibles;
un puñal está alzado entre los coches
y hay bocas con espinas invisibles.
Acumulan tesoros los fantoches
y tremenda vergüenza de inservibles;
te contemplo tan Alto sin derroches
y todas mis consultas son posibles.
Qué hacer qué hacer enorme de la tierra;
se marchita el amor sin las palabras
y este silencio herido nos aterra.
Grandes resurrecciones sin olores:
túnel que es un infierno entre las cabras
y tropieza deshecho en tus temores.